Sinopsis
Un famoso futbolista se retira. Tras los homenajes, se aísla en su pueblo natal: “Villairreal de los Fantasmas”, donde su mujer dirige un colegio.
Tiempo después, con la intención de desbancar al alcalde (dueño además de una fábrica, donde trabaja medio pueblo) le proponen que se presente a la alcaldía; inicialmente él se ríe, pero la soledad del futbolista retirado se cierne sobre él y acaba aceptando; podría ser divertido.
En un mitin, el jugador anuncia que construirá un campo de fútbol 7 y propone organizar un torneo. Los chicos se entusiasman y en el pueblo no se habla de otra cosa. Sin embargo, para ganar votos, el actual alcalde chantajea a sus empleados e intenta sobornar a los vecinos. Pero es inútil, el futbolista es elegido por mayoría aplastante.
Imitando al fútbol de los grandes clubs, en la configuración de los equipos se suceden trasvases, compra de jugadores, sobornos, chantajes. Sus padrinos consiguen las botas y la indumentaria: un montón de desiguales camisetas publicitarias.
Llega el gran día. El estadio se inaugurará con el torneo. La expectación es grande: las familias, los jerarcas, la banda de música y el gordo del pueblo imitando a Manolo el del bombo. La TV local graba y el locutor imita a Andrés Montes, famoso por el “Tiki Taka”. El trío arbitral (guardias civiles) sale. Entre vítores, lo hacen también los tres primeros equipos. El cuarto equipo, sin embargo, se hace esperar. De pronto aparece… y las gradas enmudecen; visten un uniforme impecable del Barça. Su padrino, el boticario catalán, ha costeado las camisetas, las fotos y la banda de música que toca el himno del Barça.
Los otros chicos se hunden, unos lloran y otros se desprenden de sus camisetas publicitarias. La pitada es enorme, fuertes discusiones se suceden; la inauguración se aplaza.
A partir de ese momento, surgen nuevos imprevistos y graciosas situaciones que se irán solucionando con la ayuda del nuevo alcalde. Los padrinos se reúnen para encontrar una solución. El cura y el juez se ofrecen; ellos patrocinarán dos nuevos equipos y entre todos pagarán uniformes de equipos de la liga nacional.
Llega de nuevo el domingo, que comienza de la misma forma: las exageradas familias y las vehementes autoridades en las gradas, la banda de música tocando un pasodoble y la TV local retransmite llamando a todos por sus graciosos motes. El equipo arbitral sale al campo. A semejanza con el fútbol y la política nacional, aparecen los equipos: “Rambla de la Botica”, con uniforme del Barça (Cataluña); “Calle Arriba”, Athlétic de Bilbao (País Vasco); “El Calle de Enmedio”, Real Madrid (Gobierno); “El Calle de Abajo”, verde y blanco (Andalucía); “Plaza del Pueblo”, Selección Nacional (Jueces). Y, creando conflicto por su tardanza, “El Plaza de la Iglesia”, con uniforme semejante a la vestimenta de los monaguillos.
A partir de ahí todo se liará…
Una divertidísima película para todos los públicos…
Situaciones absurdas. Lógicas irracionales.
Con un final maravilloso que el público aplaudirá.